es un caballero inglés, recomendable exponente de la Ciencia Geográfica mundial pertenece, en efecto a la Sociedad Real de Geografía de Londres, y a la Sociedad Geográfica de América. Este Señor, por cuenta de la Compañía minera de Portobello, en Zaruma, ha recorrido toda la Provincia del Azuay, inclusive su Oriente, pero en especial los contrafuertes Suroeste del Nudo del Portete y parte de la Parroquia de Molleturo. Mediante estos estudios ha levantado un mapa de esta Provincia, enriquecido con todos los adelantos actuales de la Ciencia geográfica, y con la mas exacta y completa minuciosidad de detalles.
Obedece este trabajo de grande valía, al noble propósito, como me lo aseguró, el sabio autor, de dar a conocer en el extranjero la valía de la Provincia del Azuay, muy superior al de cualquiera de las otras Provincias ecuatorianas. Acreedor es por eso quien así ama a nuestro suelo, a la gratitud de los verdaderos ciudadanos: tal gratitud quiere el autor de esta nota manifestar al Sr. Villiers, dando a conocer en Cuenca esos valiosos trabajos realizados. Con lo que el mencionado Señor ha hecho, realmente ha probado que bien amaba a la Provincia, rica, bella y hospitalaria.
Si no de propósito, por no ser esta su especialidad, mientras el Señor Villiers estudiaba sus asuntos geográficos por Molleturo, dedicó también un momento su atención a las ruinas incaicas del gran cerro de Paredones de Molleturo, que podemos llamarle de Huana Capac, morada religiosa y de recreación de este Inca Tomebambense, donde, según el cronista Albornoz, puso gran suma de huacas y donde acostumbraba descansar de las fatigas de la guerra y del gobierno. Este trabajo del Sr. Villiers es sumamente interesante ya como rasgo prehistórico, ya como aporte nuevo de un objeto arqueológico desconocido. Desconocido realmente, porque si algún arriero o algún labriego de tales lugares nos hacían indicaciones de esas ruinas, o no despertaban interés, o el que despertaban en algún ánimo generoso, decaía luego envuelto en mil dificultades de estudiarlas.
Pero el Sr. Villiers ha estudiado detenidamente dichas ruinas, hasta comparado con algunas tradiciones y crónicas antiguas; ha levantado planos ya del conjunto de las ruinas, ya del mayor de sus varios edificios. Además nos ha regalado con dos fotos postal del cerro de Molleturo el uno, y de un salón del palacio incaico el otro.
Trabajos de esta índole no son para desestimarlos. Por eso el Centro de Estudios Históricos y Geográficos de Cuenca, acoge gustoso el del Sr. Villiers, y enriquece con él este Número de su Boletín.
Miguel T. Durán
(1930)
Obedece este trabajo de grande valía, al noble propósito, como me lo aseguró, el sabio autor, de dar a conocer en el extranjero la valía de la Provincia del Azuay, muy superior al de cualquiera de las otras Provincias ecuatorianas
Si no de propósito, por no ser esta su especialidad, mientras el Señor Villiers estudiaba sus asuntos geográficos por Molleturo, dedicó también un momento su atención a las ruinas incaicas del gran cerro de Paredones de Molleturo, que podemos llamarle de Huana Capac, morada religiosa y de recreación de este Inca Tomebambense, donde, según el cronista Albornoz, puso gran suma de huacas y donde acostumbraba descansar de las fatigas de la guerra y del gobierno. Este trabajo del Sr. Villiers es sumamente interesante ya como rasgo prehistórico, ya como aporte nuevo de un objeto arqueológico desconocido. Desconocido realmente, porque si algún arriero o algún labriego de tales lugares nos hacían indicaciones de esas ruinas, o no despertaban interés, o el que despertaban en algún ánimo generoso, decaía luego envuelto en mil dificultades de estudiarlas.
Pero el Sr. Villiers ha estudiado detenidamente dichas ruinas, hasta comparado con algunas tradiciones y crónicas antiguas; ha levantado planos ya del conjunto de las ruinas, ya del mayor de sus varios edificios. Además nos ha regalado con dos fotos postal del cerro de Molleturo el uno, y de un salón del palacio incaico el otro.
Trabajos de esta índole no son para desestimarlos. Por eso el Centro de Estudios Históricos y Geográficos de Cuenca, acoge gustoso el del Sr. Villiers, y enriquece con él este Número de su Boletín.
Miguel T. Durán
(1930)
1 comentarios:
muy grato relato de quien fue mi bisabuelo, me gustaría saber si tienen alguna información adicional sobre el, allá en las hermanas tierras ecuatorianas.
saludos desde Lima-Perú
Cecil H. SUAREZ VILLIERS
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