MISCELANEA CUENCANA

José de la Mar, Cuenca 1778.- Cartago (Costa Rica) 12 de Octubre de 1830.- Sombra luminosa que adviene a la tierra como reencarnación de un personaje antiguo, condenado por los dioses a peregrinar nuevamente por la vida para purgar no sé que faltas; constantemente perseguido por el dolor, la traición y la calumnia, como si las Eríneas se cebasen en una víctima predestinada.- Su existencia está envuelta en misterios y contradicciones. Guayaquil tuvo la suerte de darle vida, Cuenca la fortuna de darle cuna y el Perú la gloria de proporcionarle patria.
Ligado al Rey de España por un juramento y por su honor de caballero de otras edades, detuvo durante algunos meses a la Libertad de América, diosa en cuyos altares secretamente comulgaba.
Tocóle medirse con San Martín y con Bolívar y dar el golpe que decidiera la victoria de Ayacucho, después de haber logrado que Sucre se aventurase a empeñar esa batalla.- Presidió tres veces nuestros destinos; y siempre su patriotismo y su fuerza recibieron en recompensa la felonía y el escarnio.- Murió en el destierro, y sus compatriotas de las repúblicas bolivarianas ensañáronse en su memoria.- Pero ahora empiezan a brillar las luminarias de sus virtudes, porque las nubes de la pasión no sobreviven a un siglo de acendramiento.>>(Pag. 49, copiado íntegro el capítulo).
Los arqueólogos peruanos han investigado científicamente la necrópolis de Paracas, y comprobado que es un cementerio principesco, en el que sólo yacen los cuerpos de grandes personajes, sacerdotes o reyes, a juzgar por la magnificencia de los vestidos.- Esto abre la inmensa interrogación:
¿Dónde están enterrados los niños, los pobres y las mujeres del evolucionado imperio desconocido, que exhibe tejidos y joyas reveladores de una cultura admirable, y cráneos trepanados y cuerpos momificados con una técnica sorprendente…(Pag. 163)
A los campiñeros arequipeños, Alaiza los llama lonccos (longos)- Pag. 231.
El incendio en la Biblioteca Nacional de Lima tuvo lugar el 9 de Mayo de 1943.
<<…..¿Y la guerra de 1829? replican los impugnadores; esa guerra promovida por Bolívar al virtuoso La Mar, para detener al Perú en una carrera próspera que hacía sombra a Colombia. Si. La guerra fue obra de Bolívar.