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SOCIEDAD BOLIVARIANA DE CUENCA

Author: Teodoro Albornoz /

Exmo. Señor Arzobispo de la Diócesis
Señor Presidente de la Sociedad Bolivariana de Cuenca,
Señor Vicepresidente del Núcleo del Azuay de la Casa de la Cultura
Señor Doctor Ricardo Márquez Tapia y sus distinguidos familiares,
Señoras, Señores:


Venezuela ha reconocido el procerato que el Ecuador tiene en mantener el recuerdo, la gratitud y la admiración a Simón Bolívar. Si el Ecuador se enorgullece de esa honra, dentro de él le cabe a Cuenca, siempre alerta en los dictados del civismo, en conservar la primacía en el culto al Héroe epónimo de América. Ello se inicia desde los días mismos de la emancipación, pues, si el Cabildo cuencano decide entonces levantar una estatua al Libertador, un fraile egregio –Fray Vicente Solano- le erige el monumento moral al querer verlo de monarca del gran Imperio Republicano de los Andes.

Las voces del ditirambo, salidas de pechos sinceramente enfervorizados, aclaman al ídolo de sus simpatías de uno a otro extremo de la comarca, cuando él visita esta tierra, que lo recibe como a vencedor y lo aclama como a adalid máximo de la Libertad deseada y conseguida.

Más tarde un gran poeta nuestro –don Luis Cordero- empuña la lira y canta al campeón de cien victorias un himno jubiloso:

“Ecuador a las plantas del Héroe
pon , rendido, la espada triunfal….
¡Sea el grande, el excelso Bolívar
nuestro númen augusto de paz;
templo suyo la América toda;
Chimborazo su espléndido altar!

Después, Remigio Crespo Toral le tributa la magnífica ofrenda de dos libros: “Ultimos pensamientos de Bolívar”, en verso, y “Bolívar, el Héroe y el Genio de América” en fulgurante prosa; libros en los que el lector no sabe que admirar más, si las notas del plectro lírico diestramente manejado o las cláusulas de oro, cláusulas tersas y límpidas, en las que cada frase se convierte en una hoja de laurel.

Y así, en pléyade renovada a medida que pasa el tiempo, muchos poetas y escritores azuayos han rendido su tributo al Libertador. Entre ellos, figura el Sr. Dr. Ricardo Márquez Tapia, quien, no hay duda, que en el país, se destaca en la labor bolivariana por la constancia, por la persistencia, por la pasión admirativa con que la realiza, impelido por el noble afán de generalizar, de extender, de profundizar, de hacer más intenso y más extenso el vivo culto al Libertador.

El Dr. Márquez ha estudiado a fondo la vida y hechos de Bolívar y de los principales próceres que le acompañaron en la gran empresa de la Emancipación.

La figura de cada uno de ellos la conoce en sus menores detalles y, por eso, puede presentarlas en sus rasgos exactos para lograr esculpirlas en la mente y corazón de quienes leen sus numerosos escritos de este género; escritos que son como un yunque de acerado hierro en que su pluma perseverante golpea, a manera de martillo, para arrancar chispas de luz que iluminan la figura admirable del Libertador.

Homenaje de justicia es el que hoy tributa la Sociedad Bolivariana del Ecuador al otorgar su significativa Insignia al SR. Dr. Ricardo Márquez Tapia, porque es justicia reconocer los merecimientos de un escritor que, a través de largos años, ha efectuado un trabajo tesonero, infatigable, cultivando el campo de las Letras y las ciencias históricas de su predilección, principalmente las relacionadas con lo íntimamente nuestro. Y, como en lo íntimamente nuestro, en lo más querido y admirado, está Bolívar, a Bolívar he rendido el Dr. Márquez, en múltiples oportunidades, los brotes de su pluma nunca en descanso, siempre en útil actividad.

Al entregar el Acuerdo dictado por la Sociedad Bolivariana de Cuenca…en nombre del Sr. Alcalde Dr. Ricardo Muñoz Chávez –que me ha delegado para que lo represente en este acto- como Presidente del “Centro de Estudios Históricos y Geográficos de Cuenca” y de manera personal mía de antigua amistad, al congratularme de este merecido homenaje, felicito al Sr. Dr. Márquez por el público reconocimiento que se hace de su fecunda y valiosa labor intelectual.

VICTOR MANUEL ALBORNOZ

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